La tarjeta de crédito es un instrumento que nos concede cierta libertad a la hora de hacer compras, ya sea para permitirse adquisiciones costosas o pagar por una compra a largo plazo. Este proceso sucede de la siguiente manera: pagamos algún bien con la tarjeta emitida por un banco y, en una fecha acordada previamente, la entidad financiera nos enviará una factura, que es cuando realmente pagaremos por lo que compramos. Así, tener tarjetas de crédito disponibles es una actitud que todos deberíamos tener.
Legalmente, las tarjetas de crédito no son instrumentos crediticios, ya que se libera a través de un contrato, además de poseer documentos que respaldan todas las compras llevadas a cabo por el titular. Generalmente, las entidades finacieras tienen un seguro para protegerse cuando los compradores no pagan la factura.
Más información sobre tarjetas de crédito disponibles
Y es exactamente de esta manera que los titulares de las tarjetas firman el contrato con los bancos. Sin embargo, algunos clientes terminan ignorando la realidad que tendrán que desembolsar dinero para pagar sus gastos. Por esta razón, es esencial que tengamos responsabilidad a la hora de usar nuestras tarjetas de crédito disponibles.
Como se ha mencionado, utilizar una tarjeta de crédito puede generar beneficios pero también perjuicios. Esto va a depender de como cliente la va a usar. Si la utilizamos de manera responsable, logramos maximizar sus beneficios, que va desde el momento en que compramos hasta que acumulamos puntos. Utilizar el crédito disponible de manera consciente nos ayuda a darle un uso más cuidadoso, como reservar una parte de este crédito para emergencias.
También, es importante entender que la función de crédito no es una extensión de nuestros ingresos. De esta manera, tenemos que planificar bien nuestras compras que se llevarán a cabo en la función de crédito para que los pagos no sobrepasen nuestros ingresos, ya que al no pagar la factura se generan intereses muy altos.
De todos modos, poseer tarjetas de crédito disponibles es muy importante para nuestra planificación económica, ya que, con el uso consciente, estes instrumentos nos ayudarán a evitar deudas y problemas con emergencias.