El Banco Central de México (Banxico) redujo la tasa de interés básica en 25 puntos básicos a 7.50% anual. En su declaración, la institución citó la desaceleración de la economía mundial y los bajos niveles de inflación como justificación para el recorte. La decisión de reducir las tasas de interés a 7.50% por año fue tomada por mayoría, pero dos líderes votaron a favor de un recorte mayor, a 7.25% por año, según el comunicado.
La autoridad monetaria mexicana señaló que los mercados financieros mundiales se han vuelto menos volátiles desde la última reunión de política monetaria en septiembre debido a la menor tensión comercial entre Estados Unidos y China. «Aún así, la economía mundial sigue enfrentando riesgos asociados a tensiones comerciales y factores geopolíticos, así como a incertidumbres en varios países», dijo Banxico.
En cuanto a la inflación, el Banco Central de México destacó que «el comportamiento reciente de los factores que afectan la trayectoria esperada sugiere que la inflación global podría estar ligeramente por debajo de la trayectoria presentada en el anterior informe trimestral.
Sin embargo, la institución consideró que si surgen factores de riesgo para la inflación y sus expectativas, «la política monetaria se ajustará de manera oportuna y firme».
El Banco Central de México también citó incertidumbres relacionadas con la relación bilateral entre México y Estados Unidos y destacó la necesidad de que se adopten medidas, junto con una política monetaria «prudente y firme», para consolidar una trayectoria sostenible de las cuentas públicas y crear un entorno de confianza para la inversión. La autoridad monetaria también subrayó la importancia de fortalecer el estado de derecho y de combatir la corrupción y la inseguridad.
Desde el tercer trimestre de 2018, el par ya ha retrocedido casi un 14% y la disminución de la volatilidad del par ha sido notable. Sin embargo, más recientemente, el banco central mexicano ha vuelto a recortar las tasas de interés en 25 puntos básicos en la reunión del jueves pasado, el tercer recorte consecutivo, llevando la tasa de referencia a 7.50%, enfatizando que las perspectivas de crecimiento económico se han venido deteriorando en los últimos meses. También hay que tener en cuenta que dos de los miembros votaron a favor de una flexibilización más agresiva, pidiendo un recorte de 50 puntos básicos. La incertidumbre en América Latina también sigue pesando sobre el sentimiento, que ya estaba bajo la presión de las tensiones comerciales mundiales.
Técnicamente, el par se encuentra en una formación triangular descendente a largo plazo (desde el tercer trimestre de 2018), pero más recientemente las perspectivas de caída continúan intensificándose y se necesita precaución ante la posibilidad de que el par finalmente rompa el soporte de 21 pesos. Los máximos relativos cada vez más bajos desde agosto impulsan esta perspectiva. Sin embargo, no se descarta un nuevo rebote a este nivel dada la consolidación actual.
